Preocupación en Justo Daract por la situación laboral de los trabajadores del frigorífico
Las actividades están suspendidas hace tres semanas y no saben qué ocurrirá con el futuro de los empleados.
“Incertidumbre”, así el estado en el que viven 30 familias de Justo Daract luego de que se conociera el traspaso del frigorífico Coronel Moldes a manos del Estado provincial en el marco del Plan Carnes San Luis.
Hasta hace un mes atrás, estaba administrado de manera privada, pero el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá no renovó la concesión. Y desde el 9 de abril la actividad cesó, provocando preocupación en los trabajadores.
En este contexto, el concejal de la Unión Cívica Radical, Ramón Guerrero se reunió con funcionarios del ministerio de Producción provincial.
“El 6 de abril fui recibido por Agustín Martínez y Agustina Rodríguez. Me dijeron que les daban continuidad a los trabajadores y a su vez iban a garantizar la continuación de la faena. Cosa que no se ha cumplido de ninguna manera”, apuntó en declaraciones a El Chorrillero.
El legislador advirtió que el personal aún no sabe si será indemnizado por la empresa aunque “les ha hecho un ofrecimiento pero no por el total”.
“Ellos se están tirando la pelotita, mientras tanto el gobernador mira para el costado y el intendente (Alfredo Domínguez) directamente para abajo, no les interesa”, manifestó.
Por lo mismo, insistió en la inquietud que genera la situación: “Justo Daract no soportaba ningún solo desocupado más”.
“Hable con la diputada Anabela Lucero y me contestó que del ministerio se iban a contactar conmigo. El intendente dice que no sabe nada”, precisó.
Asimismo, planteó que “lo más llamativo” de la problemática es que “no salió la licitación del frigorífico como sí ocurrió con el de Beazley, Unión, San Martín y Quines”.
“Se lo quiere quedar el Estado, Sol Puntano es el Gobierno de San Luis”, apuntó.
Guerrero hizo énfasis en “el daño en lo económico, social y cultural que ha causado el Gobierno con no renovarle el contrato o no llamar a licitación pública” porque “Daract no soporta un solo puesto de trabajo menos”.
Por su lado, los diputados provinciales Luis Lucero Guillet y Víctor Sosa presentaron un pedido de informe al Ejecutivo.
Buscan conocer “cuál es el trámite o servicio del Senasa en el que se encuentra actualmente la situación del frigorífico y en qué etapa del mismo figura”.
Además, solicitaron saber qué fecha tienen previsto para retomar el funcionamiento y las “medidas paliativas” del Gobierno para “las carnicerías y pequeños locales de la localidad que trabajan coordinadamente y que se ven afectadas económicamente por esta situación”.
En otro de los puntos, indagan sobre “cómo quedará la situación laboral de los trabajadores en ese traspaso al Estado provincial”.
Esta semana, se conoció el cierre de la fábrica Dánica en Villa Mercedes, lo que también generó incertidumbre en 130 familias que dependen de la empresa.